Me preguntaste si tú eras alguien especial para mi, yo te conteste que nada era especial para mi en este mundo y me dijiste que debía ser muy triste vivir solo en un lugar donde nada tuviera valor. Entonces yo te dije que la vida era un absurdo, que todo carecía de sentido y no había diferencia alguna entre triunfar y fracasar. Te dije muchas verdades y te diste cuenta que yo no era distinto al resto, era igual que todos con la única diferencia de que yo era honesto conmigo mismo y no me inventaba ninguna razón para seguir viviendo.
-Hagas o no hagas eso para conseguir lo que tanto deseas, siguiendo cualquier opción, sufrirás irremediablemente de cualquier manera. Tira una moneda y decide.-
Me confesaste que no querías que me alejara de ti. Te dije que siempre me tendrías cerca mientras no olvidaras lo que aprendiste de mi. Si me dices que todo este tiempo nada te he enseñado entonces olvidame y deja de perder el tiempo. Tira una moneda y decide.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
cuando el amor llega todo es diferente,la apatia de vivir negando la felicidad y lo bello desaparece,ya lo notaras ¡¡¡¡ un cariño
ResponderEliminar